martes, septiembre 20, 2005

Lavado...lo que se dice lavado...

El obispo de Aguascalientes, Ramón Godínez Flores, acaba de llevar el lavado de dinero a un nuevo nivel. Y es que según el jerarca religioso, al recibir las narcolimosnas, éstas "se purifican" con la buena intención de ayudar.
El obispo tiene razón al decir que las iglesias no están obligadas a investigar el origen del dinero que reciben, pero de ahí a legitimar las ganancias del narco, hay una enorme distancia. El gobierno de Fox ya salió a expresar su condena. Los superiores de Godínez Flores tendrán que hacer lo propio. ¿Qué Benedicto XVI no acaba de referirse al problema del narcotráfico en nuestro país? De veras que hay algunos que tienen la cabeza muy dura.

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