jueves, abril 09, 2009

Un reality show sobre la crisis

¿Se vale lucrar con la crisis? ¿Es ético hacer un espectáculo de la angustia de millones de personas que están perdiendo su empleo en todo el mundo? Para la empresa Endemol (los mismos de Big Brother) no hay duda de la respuesta: sí. Por eso ha lanzado un reality show - 'Someone's gotta go' - que tiene como tema central el recorte de empleos en una empresa. Aquí la historia que publicó hace unos días el diario El Clarín:

"La idea está basada en los estragos que viene haciendo la crisis financiera mundial en decenas de empresas norteamericanas. Bajo el nombre "Alguien tiene que irse" el programa mostrará cada semana cómo el dueño o jefe de la compañía protagonista en la serie reunirá a sus empleados y les dirá que alguien deberá ser despedido. El gerente facilitará a los empleados toda la información disponible, sobre sueldos y evaluaciones con el desempeño laboral, entre otros aspectos, y los dejará decidir. Sin embargo, habrá un requisito esencial: "El jefe es intocable", explicó David Goldberg, delegado de la productora Holandesa Endemol a cargo de la inciativa." (Más información)

¿Se volcarán las audiencias del mundo a ver este programa o habrá protestas de quienes creen que el tema no es para ponerse a jugar y trivializarlo de esa forma? Sin duda yo me apunto entre los segundos, ¿ustedes qué piensan?

1 comentario:

Edgar D. Heredia Sánchez dijo...

La pérdida del compromiso social

En tiempos de crisis e incertidumbre los hombres suelen o bien sublimarse o bien hundirse, de hecho son en estas circunstancias cuando se reconoce la calidad humana de los sujetos, mundialmente se vive una cruzada moralina sobre la falta de sensibilidad de diversos sectores con respecto a la crisis económica que se vive en la actualidad, los bonos multimillonarios groseros a ejecutivos francamente incompetentes, funcionarios gubernamentales o representantes populares que se proponen duplicar o elevar sustancialmente sus ingresos por sus servicios profesionales; aún cuando éstos estén más que cuestionados, se censura más los actos inadecuados de funcionarios públicos ya que sus ingresos proviene de fuentes públicas, sociedad vía los impuestos, derechos, obligaciones, entre otras, que contribuyen a la paga de sus servicios, aun cuando el grueso de la sociedad realice recortes personales en sus gastos financieros para no dejar de cumplir con sus obligaciones sociales; sin embargo; igual nivel de rechazo y reprobación debería alcanzar a las personas morales privadas, que recurren a lucrar y a la difusión de conceptos e ideas que explotan lo más reprobable de la condición humana, que no por el hecho de anidarse y ser parte consustancial del humano deberían dar lugar a manifestaciones de libertad de expresión y creativa, el morbo ya sea de este reality show o bien donde se muestra la agonía de una mujer en una enfermedad terminal, o bien de un transexual que se hace pasar por mujer para ser objeto de la seducción "ocultando" se real naturaleza a los participantes, tiempo después se demostró que todos los participantes habían tenido alguna experiencia homosexual y que estaban advertidos de dicha condición de su objeto de seducción. Lo cual, es doblemente atroz en términos de ética pública se explota el morbo y se tima al auditorio ya que se expresa la existencia de un guión maqueta que determina el rumbo a seguir en estos programas, con lo cual se comete fraude, ya que estos reality shows lo que buscan es manifestar la reacciones naturales de sujetos comunes y corrientes. Siempre he considerado que la televisión o cualquier medio de comunicación no son responsables de difundir valores positivos, o bien educar a colectivos bajo determinados principios dado el riesgo que se subsume en ello, pero al mismo tiempo creo que los medios no tienen por que apologizar sobre conductas que debilitan los lazos de identidad y compromiso social.