lunes, junio 29, 2009

El poder de una imagen: un presidente en pijama



Me queda claro que a esas alturas Manuel Zelaya, Presidente hondureño, tenía problemas más graves que cuidar su imagen, por ejemplo, encontrar la forma de regresar a su país que en pocas horas ya había tomado posesión a un nuevo Mandatario. Sin embargo, no entiendo porqué no hubo nadie en Costa Rica que le prestara otra cosa para vestirse antes de salir a dar una conferencia de prensa en pijama.

La imagen del Presidente Zelaya resulta parte de la historia porque así lo sorprendieron los soldados y así lo sacaron del país. Por eso la pregunta, ¿habrá sido una medida pensada para ilustrar lo intempestivo del asunto o simplemente no hubo nadie que le ofreciera una camisa y unos jeans? Como sea, queda para la historia el día que un Presidente tuvo que salir a los medios en su ropa para dormir. (Yo, por si las dudas, ya estoy pensando en renovar mi guardarropa...uno nunca sabe)

1 comentario:

Edgar D. Heredia Sánchez dijo...

El uso retórico de las imágenes.

Vivimos hoy día tiempos donde la imagen, el ademán, las palabras catapultan o entierran proyectos políticos y la proyección de los personajes públicos, la sociedad tiene un frenesí por la pulcra imagen de sus representantes públicos, es decir de todos aquellos que aparecen en los medios de comunicación, la imagen de Zelaya en traje de noche, pijama, también es un uso calculado de la vileza con que los militares hondureños lo han tratado ni siquiera me dieron tiempo de sacar mi ropa, antes digan que duermo vestido, con eso se busca proyectar no sólo la imagen de un líder derrocado, sino que además ha sido tratado como persona indignamente, no hay error, todo está calculado la barbarie y sin razón de su deposición y la proyección de una víctima más del autoritarismo ha quedado plasmada.