miércoles, diciembre 12, 2007

Cómo sobrevivir a las noticias 1 (Un proyecto sobre consumo de medios)

(Versión post de mi artículo de Etcétera del mes de enero 2008 e introducción al libro-experimento: "Cómo sobrevivir a las noticias")

Aprendamos a mirar.

Aprender a consumir medios es el gran reto en el año que está por iniciar. Luego de un 2007 marcado por una intensa actividad en la esfera mediática -revés de la ley Televisa, reforma electoral, etc.- ahora toca el turno al consumidor de medios.

El 2007, es verdad, nos permitió ver a políticos, gobernantes, periodistas y concesionarios interactuar de formas nunca antes vistas, actos que alimentaron generosamente a quienes nos dedicamos al análisis de los medios pero que no necesariamente enriquecieron a los televidentes, dada la ausencia de una educación en la materia, lo que nos lleva a poner sobre la mesa una de las premisas del consumo de medios: que se se aprende sobre la marcha y eso es más que suficiente. Falso.

El consumidor habitual suele desconocer quién es el dueño de los medios que revisa, qué intereses tiene en la política y en qué otros sectores de la economía tiene negocios, elementos que pueden incidir en la construcción de las agendas informativas . El que los consumidores desconozcan estos y otros elementos -como el saber cómo y porqué se asigna una nota a un reportero– produce una relación asimétrica en la que los medios y quienes saben usarlos tienen mayor poder en perjuicio de los ciudadanos que quedan reducidos al mero papel de espectadores.

Esta situación - particularmente relevante dadas las reformas del año que termina - debe ser atendida. Basta mencionar un ejemplo: la restricción a los gobernantes, que ya no podrán aparecer con su nombre e imagen en los comerciales de radio y televisión con los que se promovían, llevará el campo de batalla a los espacios informativos; la multiplicación de las entrevistas pagadas, coberturas amplias y sesgadas a favor de gobernantes, y comentarios editoriales en pro de un personaje público serán el pan de todos los días, y evitarlo, una tarea imposible pues en aras de la libertad cada medio podrá jerarquizar las noticias y fijar posiciones sobre los temas de la agenda según juzgue pertinente.

Ante este escenario nos toca a los ciudadanos - especialmente a quienes tenemos alguna formación en la materia -hacer una tarea de educación crítica, destinada a formar mejores consumidores de medios. La apuesta en este sentido es muy simple: construir una Guía Básica para sobrevivir a las noticias.


El método, la construcción de una serie de preguntas que sirvan de apoyo a los lectores, radioescuchas y televidentes, que ayuden a balancear la relación entre los medios y los ciudadanos. Primero, con una serie de post en este blog; luego, si el contenido así lo permite, con la elaboración de un libro que pueda servir para todo público.

Veremos qué sale de este experimento. Gracias de antemano a quienes decidan contribuir con sus comentarios.

2 comentarios:

ESPARZALDABA dijo...

Sí, me parece una propuesta interesante, sobre todo porque ahora que restringieron "la publicidad de estado" en los medios electrónicos he estado observando -según mis posibilidades de espacio y tiempo- cómo se está comunicando la "clase política" y adivinar un poco los futuros movimientos mediáticos de los políticos para estar en la marquesina de la opinión pública o por lo menos estar presentes en la pregnancia ciudadana.
Creo que ahora, si se ajustan a la norma, van a tener que generar noticia y promoverse en "tierra".
Sobre otro aspecto que mencionas en cuanto a las "líneas" políticas periodísticas de los medios, pues, ahí sí que está cañón percibir los intereses que están detrás de las noticias a menos que se les de un seguimiento oportuno en varios medios para comprobar quién dice qué y quién omite qué. No se qué opinión tienes al respecto pero considero que, precisamente a esos filtros que modulan la información de acuerdo a intereses de naturaleza fáctica y política, no podemos decir que los medios "informativos" son -valga la repetición- verazmente informativos puesto que también desinforman, antes, prefiero decir que son medios de difusión, difunden información o desinformación.
Una de las ventajas de la Reforma Electoral en cuanto a las restricciones de uso de medios electrónicos es que se van a potenciar los mensajes en los medios impresos, pero, hay un pero terrible, el nivel de lectura en nuestro país sigue siendo muy bajo y aquellos que logran leer algo recurren a la pseudoliteratura o la prensa harto amarillista... Es importantísimo promover la lectura y con ella la comprensión de lo que se lee, sino ante la desinformación el ciudadano medio no podrá "leer entrelíneas" y discernir la comunicación que recibe y así consecuentemente tomar decisiones y sobre todo opinar y manifestarse.
La deficiencia en cuanto a ordenar ideas y expresarlas lo vemos día a día en las calles pero sobre todo la falta de reflexión sobre el entorno social, económico y político. A veces hasta creo que la estrategia sitemática de los políticos es que el deplorable nivel educativo siga vigente.
Parecererá chiste, pero uno de los primeros puntos en la guía básica para leer el discurso político sería: Si niegan algo significa que lo están afirmando.

ora dijo...

Considero pues, que para comenzar debemos identificarnos plenamente; es decir Mario, cuéntanos cual es tu agenda, por qué quieres hablar de esto... Esta guía de lectura de medios cumple con qué... y a quién.

Yo soy Oscar Romero, estudiante de comunicación en la uia, antes estudié siete semestres de mercadotecnia en el tec. Soy mexicano y estoy cansado de la inanición social, me da tristeza ver que los medios no se sepan medios (con todo lo que esto implica). Mi agenda no es oculta, es en pos de una educación mejor para ver si podemos hacer algo por este país. Soy un ente confundido. Vivo en Metepec.